La idea de que espacio y tiempo puedan formar una superficie cerrada sin frontera
tiene también profundas ¡aplicaciones sobre el papel de Dios en los asuntos del
universo. Con el éxito de las teorías científicas para describir acontecimientos, la
mayoría de la gente ha llegado a creer que Dios permite que el universo evolucione
de acuerdo con un conjunto de leyes, en las que él no interviene para infringirlas. Sin
embargo, las leyes no nos dicen qué aspecto debió tener el universo cuando
comenzó; todavía dependería de Dios dar cuerda al reloj y elegir la forma de ponerlo
en marcha. En tanto en cuanto el universo tuviera un principio, podríamos suponer
que tuvo un creador. Pero si el universo es realmente autocontenido, si no tiene
tiene también profundas ¡aplicaciones sobre el papel de Dios en los asuntos del
universo. Con el éxito de las teorías científicas para describir acontecimientos, la
mayoría de la gente ha llegado a creer que Dios permite que el universo evolucione
de acuerdo con un conjunto de leyes, en las que él no interviene para infringirlas. Sin
embargo, las leyes no nos dicen qué aspecto debió tener el universo cuando
comenzó; todavía dependería de Dios dar cuerda al reloj y elegir la forma de ponerlo
en marcha. En tanto en cuanto el universo tuviera un principio, podríamos suponer
que tuvo un creador. Pero si el universo es realmente autocontenido, si no tiene
ninguna frontera o borde, no tendría ni principio ni final: simplemente sería. ¿Qué
lugar queda, entonces, para un creador?
lugar queda, entonces, para un creador?